El 25 de mayo de 2016 se celebró un acto de protesta en Presidencia de la Junta de Extremadura, para rechazar las medidas que la administración regional tiene para el control de la tuberculosis bovina. En dicho acto, la Consejera portavoz, Isabel Rosiñas, recibió a los representantes de las tres asociaciones de ganaderos convocantes, que le trasladaron las medidas reivindicadas en la protesta. El compromiso de la Consejera era que trasladaría las propuestas a la Consejería de medio Ambiente, al Presidente de la Junta de Extremadura y que nos comunicaría la respuesta.
Entendemos que un mes es tiempo suficiente para que se nos hubiese convocado y comunicado las medidas que la Administración va a tomar para controlar la enfermedad sin arruinar a los ganaderos. Como ello no ha sucedido y las medidas que han anunciado en prensa nos parecen insuficientes, La Unión de Extremadura va a convocar una reunión con el resto de asociaciones ganaderas para continuar con los actos de protestas al finalizar el verano.
Es imprescindible garantizar a los ganaderos que los métodos de análisis que se utilizan para comprobar el estado sanitario, son fiables, no como hasta la fecha donde el porcentaje de error supera el 60%.
Además, es fundamental permitir el libre tránsito de animales al matadero. Hay que actualizar las indemnizaciones, estas se tienen que ajustar al precio de mercado y se tiene que abonar en el plazo máximo de un mes desde el sacrificio.
Mientras que la prevalencia en la fauna salvaje sea superior a la de la ganadería, el inmovilizar las mismas solo supone una pérdida de tiempo y dinero para los ganaderos, por lo que hasta que el control de la fauna salvaje sea una realidad se debe permitir el libre tránsito de las ganaderías.
En Extremadura tenemos alrededor de 13.282 explotaciones de vacas nodrizas con un censo de 453.635 animales, el 22% de la cabaña nacional, a los que esta enfermedad nos viene costando entre los vacíos sanitarios, el sacrificio de animales enfermos, las inmovilizaciones de las ganaderías y las ventas baratas de terneros procedentes de estas explotaciones alrededor de 64 millones de € anuales.